Metrópolis es una temática retrofuturista en la que los elementos arquitectónicos ultramodernos se combinan con detalles de mecánica antigua.
Hélices, engranajes, depósitos u ojos de buey son algunos de los principales efectos visuales, que recrean una estética de ciencia ficción inspirada en los sueños y visiones de ciudades del futuro de Julio Verne o de Fritz. Los juegos de exterior se transforman en laboratorios de investigación, máquinas del tiempo o vehículos futuristas. Todos estos elementos se combinan y encajan entre sí para transmitir una sensación de movimiento constante.
El color cobre, identificativo de esta temática, refuerza la sensación de una zona de juegos desplazada en el tiempo.